El arquitecto, desde una visión técnica, es la persona capacitada para diseñar espacios. En cambio, aquel que está interesado en la arquitectura o es un arquitecto, responderá que no solo trabaja haciendo líneas con algún sentido lógico encima de un papel extenso, sino que, es el creador que alterna lo que nos rodea. Ser un arquitecto es mucho más que crear casa o edificios; es saber enlazar el arte y lo técnico para crear estructuras que impacten en la vida de las personas.
Un arquitecto es aquel que tiene la capacidad de imaginar y crear aquello con lo que muchos sueñan. Además, hay que tener en cuenta, que el camino para ser arquitecto no es fácil. Un arquitecto lo es, por vocación, porque siente algo diferente cuando va paseando, porque piensa que puede llegar a cambiar las cosas. Un arquitecto es aquel que es ambicioso, que busca lo mejor, por eso, aunque digan que la carrera es complicada y costosa, él continúa.
Un arquitecto no es solo aquel que crea cosas grandes como la ópera de Sídney o la Torre Eiffel; un arquitecto es aquel que crea hogares donde la gente va a vivir recuerdos e historias. Estos tienen la responsabilidad de soñar con aquello que otros sueñan, de pensar, con lo que otros piensan para satisfacer lo que los humanos desean.
Además, ser arquitecto implica una gran responsabilidad. Las decisiones que este hace pueden alterar gravemente, por eso este tiene que tener en cuenta la cultura, el contexto histórico, saber unir el pasado con el futuro, y la naturaleza, saber realzar el entorno que lo rodea y respetarlo.